Semillas De Cadillo.
Lectura Isaías 55: 8-13
Los cadillos son unas verdaderas plagas. En verano, sus vainas están cubiertas con aguzadas espinas que se enganchan a todos. Pero estas molestas vainas son asombrosas.
Cada una de ellas contiene varias semillas, y germinan en diferentes años.
Escribiendo acerca de esto en la Revista Leadership Hodges decía: Así,” si la semillas A deja de germinar el año siguiente debido una sequia, la semilla B estará ahí esperando para el siguiente año, y la semilla C, para el año posterior, esperando la llegada de las condiciones correctas para la germinación”.Hodges prosigue el comentario.”Esta respuesta retardada es similar a la manera en que opera la Palabra de Dios.
Nos sentimos frustrados y dolidos cuando personas no salvas no responden inmediatamente al evangelio. Pero tenemos que aprender a esperar. Algunas estaciones son estaciones secas. Siempre hay otro año- quizás muchos años. Puede que a veces transcurran 20, 30 o 50 años antes que alguien que ha oído el evangelio reciba finalmente a Cristo.
Así, no nos impacientamos ni nos desalentemos si no vemos fruto en el acto. Habrá otra semilla para otro año.
Tenemos que seguir orando y dejarlo para el tiempo del Señor. Esta es la lección del cadillo.
D.C.E.
Lectura Isaías 55: 8-13
Los cadillos son unas verdaderas plagas. En verano, sus vainas están cubiertas con aguzadas espinas que se enganchan a todos. Pero estas molestas vainas son asombrosas.
Cada una de ellas contiene varias semillas, y germinan en diferentes años.
Escribiendo acerca de esto en la Revista Leadership Hodges decía: Así,” si la semillas A deja de germinar el año siguiente debido una sequia, la semilla B estará ahí esperando para el siguiente año, y la semilla C, para el año posterior, esperando la llegada de las condiciones correctas para la germinación”.Hodges prosigue el comentario.”Esta respuesta retardada es similar a la manera en que opera la Palabra de Dios.
Nos sentimos frustrados y dolidos cuando personas no salvas no responden inmediatamente al evangelio. Pero tenemos que aprender a esperar. Algunas estaciones son estaciones secas. Siempre hay otro año- quizás muchos años. Puede que a veces transcurran 20, 30 o 50 años antes que alguien que ha oído el evangelio reciba finalmente a Cristo.
Así, no nos impacientamos ni nos desalentemos si no vemos fruto en el acto. Habrá otra semilla para otro año.
Tenemos que seguir orando y dejarlo para el tiempo del Señor. Esta es la lección del cadillo.
D.C.E.
Pensamiento: Nosotros enterramos la semilla. Dios da la cosecha.
Fuente: NuestroPanDiario
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